En el actual panorama, los tratamientos se han ido adaptando a las distintas fases y gravedad de la enfermedad a partir de conocimientos previos sobre patologías similares, y la investigación y desarrollo de medicación específica continúa avanzando en la prevención daños y la generación de tratamientos efectivos.
Como en cualquier patología, las indicaciones de medicamentos deben ser prescriptas por profesionales médicos, que son quienes tienen el conocimiento y la responsabilidad para realizar la indicación y el tratamiento, asimismo cualquier medicación de aplicación en seres humanos debe estar respaldada por la autorización de la Anmat y expedida bajo receta en farmacias por profesionales con matrícula de su respectivo colegio farmacéutico.
Es importante señalar, que la automedicación conlleva riesgos para la salud e incluso la vida de las personas, por lo que es imprescindible evitarla y no confundir ni utilizar medicaciones indicadas por personas que no sean profesionales médicos/as matriculados/as. La contraindicación es aún mayor para fármacos de uso en terapia veterinaria que tienen su formulación e indicaciones específicas para especies animales, no para seres humanos. Los medicamentos utilizados en medicina veterinaria son de aplicación exclusiva para animales, recetados y expendidos por médicas/os veterinarias/os.
Las herramientas de prevención son las que indica la autoridad sanitaria, tales como el distanciamiento, uso de barbijo y lavado periódico de manos. No automedicarse es una de las principales medidas para el cuidado de la salud, recomendó la federación.